By Redazione | 09/06/2025 11:50
Uno de los iconos históricos más fascinantes del Lago Mayor, suspendido entre el mito y la memoria, está a punto de reabrir sus puertas al público. El próximo 28 de junio se inauguran oficialmente los Castillos de Cannero, antiguas fortificaciones del siglo XV situadas en tres islotes rocosos frente al municipio de Cannobio, en el corazóndel Alto Verbano piamontés.
Tras años de complejas obras de restauración, el lugar, que pertenece a la familia Borromeo desde el siglo XV, vuelve a ser accesible gracias a una intervención promovida y coordinada por Terre Borromeo, que lo ha convertido en un nuevo centro cultural y museístico, dispuesto a contar siglos de historia en un marco natural de rara belleza. Un viaje a través de antiguas murallas y patios donde el lago se encuentra con la memoria.
El centro simbólico y arquitectónico de todo el complejo es la Rocca Vitaliana, en el islote principal, que ahora alberga un museo interac tivo capaz de mostrar a los visitantes toda la parábola histórica del lugar. Desde sus orígenes en el siglo XV, pasando por su papel como puesto estratégico, hasta el largo olvido que había reducido su utilidad, la narrativa del museo se articula a través de medios digitales, recorridos inmersivos y aparatos multimedia.
El museo no se limita a ser un contenedor de exposiciones, sino que se convierte en una experiencia en sí mismo: se invita a los visitantes a experimentar un itinerario que parte de tierra firme y continúa por el lago, para adentrarse después en los paseos interiores, entre patios, baluartes e impresionantes vistas sobre las aguas del Verbano. Un equilibrio entre la apreciación del pasado y las tecnologías del presente.
La ceremonia oficial de corte de cinta está prevista para el jueves 12 de junio, en un acto dedicado a las instituciones locales y las autoridades públicas. La iniciativa cuenta con el patrocinio de las regiones de Piamonte y Lombardía, así como de las provincias de Verbania-Cusio-Ossola, Novara y Varese. A ellas se unen numerosos municipios de la zona del Lago Mayor, de Angera a Stresa, de Luino a Verbania, lo que da fe de la dimensión coral de este proyecto.
El momento simbólico que anunciaba la inauguración estuvo marcado por el desmontaje de la grúa utilizada en las largas obras de renovación del edificio, iniciadas hace varios años. Su retirada representa el final de una etapa y el comienzo de una nueva era para los Castillos de Cannero, ahora listos para acoger a un público internacional.
La reapertura del recinto museístico se inscribe en un contexto territorial ya de por sí rico en atractivos turísticos y naturales. Cannobio y Cannero Riviera, las dos localidades situadas frente a los islotes de Castelli, han obtenido recientemente también la Bandera Azul 2025, galardón que se concede a las mejores estaciones balnearias italianas por la calidad de sus aguas, sostenibilidad, seguridad y servicios.
El Distretto Turistico dei Laghi confirma así una tendencia a la excelencia: a los dos balnearios del lago Mayor se unen Verbania Fondotoce - Isolino y el Lido di Gozzano, en el lago de Orta, para un total de cuatro lugares galardonados. Una demostración concreta de cómo la protección del medio ambiente, el disfrute del patrimonio y el desarrollo cultural pueden ir de la mano.
La apertura de los Castillos de Cannero representa una pieza importante en la oferta integrada del territorio de la Región de los Lagos. No se trata sólo de recuperar un yacimiento arqueológico, sino de incluirlo en una red de experiencias que combina excursiones por la naturaleza, turismo balneario, itinerarios culturales y actividades educativas. El museo, con sus soluciones tecnológicas de vanguardia, también está pensado para un público joven y escolar, ya que puede ofrecer modos de aprendizaje interactivos.
La intervención en Cannero sigue la línea ya trazada por Terre Borromeo en otros lugares simbólicos como Isola Bella, Isola Madre y el Parque Pallavicino, donde naturaleza, arquitectura e historia conviven en un modelo de gestión cultural innovador y sostenible. También en el caso de los castillos, el objetivo no es sólo atraer visitantes, sino crear conciencia.
El valor añadido del proyecto reside en su capacidad para devolver al público un bien inaccesible durante décadas, transformándolo en una atracción cultural capaz de dialogar con el presente. De hecho, la narrativa museística no se limita a exponer, sino que invita a reflexionar sobre el significado histórico, político y social de las fortalezas, símbolo de poder pero también de resiliencia territorial. Los Castillos de Cannero no sólo vuelven a la vida, sino que se proponen como modelo para futuras intervenciones en otras zonas lacustres italianas.
Para más información: terreborromeo.it/castelli-di-cannero, www.distrettolaghi.it/it/esperienze/arte-cultura-fede/monumenti/castelli-di-cannero