Un nuevo espacio dedicado a la cultura contemporánea, la Galería THEIA, abrirá sus puertas en Ancona: se trata de una “galería doméstica”, es decir, una casa que también se utilizará como espacio expositivo abierto al público. Del 12 de abril al 4 de mayo de 2025, THEIA abrirá sus puertas por primera vez con la exposición fotográfica Casa nostra. La vivienda en Italia de Massimo Baldini, en la que se expondrán cincuenta fotografías en color sobre el tema de la vivienda privada y el habitar en nuestro país. Entrevistamos al fotógrafo Massimo Baldini para preguntarle por su nuevo proyecto.
¿De dónde surgió el impulso de querer dedicar una serie de fotografías a las viviendas particulares en Italia?
En mis investigaciones sobre Italia, he fotografiado a menudo lugares públicos, como bares o restaurantes sencillos, pero también institucionales, por ejemplo en la exposición A Tour not so Grand, dedicada a museos pequeños y desconocidos. En esta ocasión he desplazado el foco hacia un espacio más privado, y en cierto modo más revelador, como es el hogar. Por ahora visto desde fuera, pero en el futuro también me gustaría entrar, con mi cámara, en las casas de los italianos.
¿Qué cree que es una “casa”? ¿Cómo la definiría?
Una casa es un entorno diseñado a nuestra imagen y semejanza, donde nos sentimos a gusto y nos reconocemos. Pero la definición que más me convenció y que adopté para este proyecto la dio el filósofo Emanuele Coccia: casa es un lugar que construimos para hacer posible nuestra felicidad.
En su opinión, ¿cuáles son los elementos que mejor distinguen el patrimonio italiano de construcción privada?
No se trata tanto de ciertos elementos en sí, sino más bien de su hibridación. En otros países ese patrimonio es más homogéneo, por razones históricas, culturales e incluso normativas. Aquí, una tradición milenaria, marcada por momentos impactantes como el clasicismo, el Renacimiento o el Barroco, convive con lo que se ha dado en llamar “arquitectura banal”, debido también a una importante desregulación, en una mezcla única en el mundo.
Las casas que fotografía siempre están bañadas por una luz blanca intensa, a veces casi cegadora, ¿a qué se debe esta elección?
No me interesan los detalles del contorno, los cielos azules o nublados, los elementos de dramatismo o lirismo que a menudo se buscan en las fotografías. Quiero que la atención del espectador no se distraiga con factores perturbadores, sino que se centre en lo que pretendo mostrar.
En el texto que acompaña a la exposición leemos que este viaje por las viviendas de nuestro país revela nuestra “italianidad”, y “italianidad” es también el título de una de sus exposiciones. Pero, ¿qué es para usted la “italianidad”?
El debate sobre la existencia de “caracteres nacionales” o el “espíritu de un pueblo”, el famoso Volksgeist, viene de lejos. No tengo ninguna ambición de participar en él, sino que simplemente creo que para comprender una identidad colectiva, en la que necesariamente se inscribe la personal, es útil documentar etnográficamente -lo mismo que utilizan los antropólogos para estudiar poblaciones distintas de la propia- una de las primeras emanaciones de esa identidad, a saber, el entorno vital.
Su proyecto Casa nostra llega después de otras series dedicadas a Italia y los italianos. ¿Qué relación guarda esta nueva serie con las demás?
Es una pieza del mosaico. Espero que al final surja una imagen de conjunto significativa.
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