Antonio Ligabue expuesto en la Reggia Reale de Monza, con 90 obras

Antonio Ligabue. L’uomo, l’artista es el título de la exposición antológica que recorre el arte de Antonio Ligabue (Zúrich, 1899 - Gualtieri, 1965), programada del 11 de febrero al 1 de mayo de 2022 en la Reggia Reale de Monza. Con noventa obras, entre pinturas, esculturas, grabados y dibujos, la exposición comisariada por Sandro Parmiggiani recorre el arte de uno de los autores más originales del siglo XX italiano.

La exposición presenta algunos de los cuadros considerados entre sus obras maestras, como Caccia grossa (Caza mayor) (1929), Circo (c. 1941-42), Tigre reale (Tigre real), obra realizada en 1941 durante la segunda estancia del artista en el hospital psiquiátrico de San Lazzaro, en Reggio Emilia, Leopardo con serpiente (1955-56), Cabeza de tigre (1957-58), Zorro con ave rapaz (milano) 1959-60, Crucifixión (principios de los años sesenta).No faltan los autorretratos, reflejo de un malestar existencial: Autorretrato con caballete (1954-55), Autorretrato con moscas (1956-57), Autorretrato con espantapájaros (1957-58), Autorretrato apesadumbrado (1957).

Los temas de la exposición

La exposición recorre los dos polos principales en los que se desarrolló la carrera artística de Ligabue: los animales, tanto salvajes como domésticos, y los retratos de sí mismo, sin olvidar otros temas como las escenas de la vida rural o los paisajes del valle del Po, en los que irrumpen representaciones de castillos, iglesias, agujas y casas con banderas al viento sobre los empinados tejados de su Suiza natal, donde nació y donde vivió hasta su expulsión en 1919: el recuerdo de su patria perdida. Ligabue representa tanto animales domésticos, atrapados en un ambiente rural, como animales salvajes (tigres, leones, leopardos, gorilas, zorros, águilas) cuya anatomía conocía muy bien, a menudo representados cuando están a punto de abalanzarse sobre su presa, con una exasperación de carácter expresionista, tanto en la forma como en el color, y con una atención casi espasmódica a la reiteración de elementos decorativos.

Los autorretratos constituyen una vertiente muy poética del arte de Ligabue. En ellos, el pintor se sitúa en primer plano, ocupando casi todo el espacio de la escena, con el telón de fondo de un paisaje que casi siempre parece, salvo raras excepciones, un detalle completamente irrelevante. Sus autorretratos resumen una condición humana perenne y constante de angustia, desolación y desconcierto, un lento camino hacia el desenlace final; su rostro expresa dolor, fatiga, consternación, el dolor de vivir. “Estos autorretratos expresan todo el sufrimiento del artista; casi podemos oír su grito mudo en el silencio de la naturaleza y en la sordera de la gente que le rodea. Cuando toda esperanza está perdida, convertida ya en cenizas, el rostro no puede sino tener este color oscuro y turbio, esta especie de petrificación de los rasgos que el dolor ha traído consigo y ha impreso en él”, afirma Sandro Parmiggiani. La exposición prestará especial atención a la producción plástica de Ligabue, con un núcleo de más de veinte esculturas de bronce, principalmente de animales.

La exposición tiene también la ambición de presentarse como un capítulo más de la correcta valoración crítica e histórica de la obra de Ligabue, y quiere ser una ocasión para reafirmar, más allá de las equívocas definiciones de ingenuo o de artista marcado por la locura, la fascinación de este “expresionista trágico” de gran valor que mezcla exasperación visionaria y gusto decorativo. Acompaña a la exposición un catálogo Skira con textos de Sandro Parmiggiani, Alberto Manguel, Luciano Manicardi (prior de la Comunidad de Bose) y una amplia sección, rica en imágenes, dedicada a la reconstrucción de su “mito”, empezando por las revistas de los años 50 y el guión televisivo de Salvatore Nocita en 1977 hasta las obras que le fueron dedicadas: la trilogía teatral Progetto Ligabue de Mario Perrotta y la película Volevo nascondermi (Quería esconderme) de Giorgio Diritti.

Un itinerario ad hoc y un kit para niños

Mientras dure la exposición, está prevista una serie de actividades educativas, encuentros y visitas guiadas gratuitas para niños y adultos. La exposición incluye un itinerario ad hoc creado para los niños, un kit educativo gratuito que se recogerá en la taquilla especialmente diseñado para la visita de los más pequeños, que ofrece experiencias de inmersión para ellos.

La exposición está producida y organizada por ViDi en colaboración con el Ayuntamiento de Monza y el Consorzio Villa Reale e Parco di Monza “Esta exposición es una extraordinaria oportunidad cultural para Monza. Pero también es una oportunidad para explotar el atractivo potencial de Antonio Ligabue en beneficio de la ciudad: para atraer visitantes, incluso de fuera de la ciudad y de fuera de la región, para volver a mostrar el arte y la belleza en presencia, para hacer descubrir o redescubrir la extraordinaria belleza de nuestra Villa Reale, y para dar oxígeno a la economía local. Por todas estas razones hemos creído y apostado por esta exposición que, estamos seguros, permitirá a los visitantes apreciar la fuerza natural e instintiva del genio de Antonio Ligabue y compartir un viaje artístico insólito”, explica el Concejal de Cultura Massimiliano Longo.

La exposición permanecerá abierta en los siguientes horarios: lunes y martes cerrado; miércoles y jueves de 10.00 a 13.00 horas / de 14.00 a 19.00 horas; viernes, sábados y domingos de 10.00 a 20.00 horas.

Para más información: mostraligabuemonza@gmail.com; www.vidicultural.com

Declaraciones

“Ofrecemos a los visitantes las obras de un artista extraordinario y completamente único”, explica el alcalde de Monza, Dario Allevi, Presidente del Consorzio Villa Reale e Parco di Monza. “Una exposición que combina talento y belleza con la agitada historia de Antonio Ligabue: el invernadero de la Villa, con su encanto, está listo para abrir sus puertas una vez más al Arte en todas sus formas”.

“Esta exposición es una extraordinaria oportunidad cultural para Monza”, explica el concejal de Cultura Massimiliano Longo, “pero también es una ocasión para explotar el atractivo potencial de Antonio Ligabue en beneficio de la ciudad: para atraer visitantes, incluso de fuera de la ciudad y de la región, para volver a mostrar el arte y la belleza de forma presencial, para hacer descubrir o redescubrir la extraordinaria belleza de nuestra Villa Reale, y para dar oxígeno a la economía local y a las actividades inducidas. Por todas estas razones, hemos creído y apostado por esta exposición que, estamos seguros, permitirá a los visitantes apreciar la fuerza natural e instintiva del genio de Antonio Ligabue y compartir un viaje artístico insólito”.

Antonio Ligabue expuesto en la Reggia Reale de Monza, con 90 obras

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