La Pinacoteca Civica ’Francesco Podesti’ de Ancona abre sus puertas a una nueva temporada de exposiciones con la muestra Carlo Maratti y el grabado, programada del 20 de diciembre de 2025 al 15 de marzo de 2026. La inauguración tendrá lugar el viernes 19 de diciembre a las 17.00. La ciudad dórica, candidata a Capital Italiana de la Cultura 2028, acaba de reabrir la pinacoteca al público, registrando cientos de visitantes en las dos primeras semanas, lo que supone un importante regreso de la institución a la vida cultural local. La exposición está comisariada por Simonetta Prosperi Valenti Rodinò y Stefano Papetti, entre los estudiosos más autorizados en el campo del Barroco romano, y forma parte del programa oficial del Comité Nacional para las Celebraciones del IV centenario del nacimiento de Carlo Maratta, creado por el Ministerio de Cultura y apoyado por la Región de Las Marcas, los Ayuntamientos de Ancona, Camerano y Ascoli Piceno, con el patrocinio de la Academia Nacional de San Luca, de la que el artista fue Príncipe.
“Con la exposición dedicada a Carlo Maratti”, afirma la concejala de Cultura de Ancona , Marta Paraventi,el Ayuntamiento de Ancona entra en el corazón de las celebraciones del artista y la Pinacoteca Civica asume el papel de palacio del arte, un centro de diseño y exposiciones donde la investigación y el estudio se unen al disfrute de las obras maestras, entre las que se encuentra el grandioso retablo de Carlo Maratti ’Virgen en la Gloria y Santos’, procedente de la destruida iglesia de San Nicola de Ancona".
“Celebrar a Carlo Maratti significa celebrar no sólo a un artista extraordinario, sino una visión del clasicismo romano que tuvo resonancia europea. El grabado fue para Maratti un instrumento de modernidad: comprendió antes que otros que la difusión de imágenes sería la clave para consolidar la memoria de su estilo”, explica Claudio Strinati, presidente del Comité Nacional para las Celebraciones del IV Centenario.
Carlo Maratta nació en Camerano en 1625 y desde muy joven mostró un talento que le llevó rápidamente a Roma, donde se formó con Andrea Sacchi. Pronto se convirtió en uno de los principales intérpretes del clasicismo barroco de la segunda mitad del siglo XVII, al tiempo que mantenía un vínculo constante con su tierra natal, a la que regresó en varias ocasiones y mantuvo relaciones con los mecenas locales. La exposición de Ancona propone un extraordinario corpus de obras, muchas de ellas inéditas o raramente expuestas, que ofrece una reflexión sobre la importancia de la reproducción de imágenes en la construcción de la fama y la identidad artística del artista. Se trata de un raro ejemplo de exposición monográfica dedicada a los grabados de Maratta, organizada con rigor filológico y científico, capaz de entrelazar investigación y divulgación. Se exponen 44 grabados, articulados por tipo y función, que componen un itinerario completo: desde grabados autógrafos a reproducciones de obras maestras, pasando por ilustraciones de libros y temas relacionados con la Academia Arcadia. La exposición pone de relieve el uso innovador del grabado como medio de difusión y consolidación de la reputación artística. Maratta supervisó la transposición calcográfica de más de 400 grabados a partir de sus dibujos y pinturas y realizó 13 grabados originales de juventud, todos ellos presentes en la exposición. Las obras, encargadas a destacados grabadores europeos, permitieron una amplia difusión del lenguaje de Maratta en cortes, academias de arte y circuitos de coleccionismo, mucho antes de la invención de la fotografía. En varios casos, los grabados se encargaron incluso antes de que el cuadro original estuviera terminado o colocado, como fue el caso de las obras destinadas a Roma, Viena y Palermo.
Sin dejar de ser fiel a un ideal de belleza armoniosa y mesurada, Carlo Maratta destacó en el panorama de la pintura barroca de la segunda mitad del siglo XVII por su sobriedad y mesura. Su clasicismo actualizado respondía a las exigencias religiosas e ideológicas de la Contrarreforma. La carrera romana del artista, tras la muerte de Pietro da Cortona y Gian Lorenzo Bernini, le llevó a convertirse en el líder de la pintura del Barroco tardío. Codiciado por papas, cardenales, embajadores, coleccionistas y monarcas, fue el retratista oficial de papas y altos prelados y realizó retablos para algunas de las principales iglesias barrocas de Roma. Entre sus mecenas figuraban familias nobles como los Altieri, y su fama se extendió a las cortes europeas, incluidos los viajeros del Grand Tour deseosos de ser retratados por el llamado “gran Maratti”.
La exposición de la Pinacoteca Civica “Francesco Podesti” se inscribe en un contexto cultural más amplio. El programa se completa con la exposiciónUmberto Grati - Spin Off, dedicada al conocido ilustrador y pintor de Ancona recientemente fallecido, que podrá visitarse hasta el 4 de mayo de 2025 con las obras más conocidas del artista, y Erratica, que tendrá lugar en la Mole Vanvitelliana hasta el 28 de febrero de 2026. Esta última exposición está dedicada al Premio de las Marcas, que vuelve a Ancona después de veinte años, y ofrece un excursus desde sus inicios hasta finales de la década de 1990, con especial atención a los 25 años en que el premio se celebró fuera de su ciudad natal, con una sección reservada a artistas contemporáneos.
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| Ancona rinde homenaje a Carlo Maratta con una exposición dedicada al grabado |
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