Una biblioteca no es sólo una colección de libros: es una geografía del conocimiento, un mapa de la memoria colectiva e intelectual. Y hoy, con la adhesión de la Biblioteca Serlupiana al Kunsthistorisches Institut de Florencia - Max-Planck-Institut (KHI), esta geografía se enriquece con una nueva cartografía de gran valor. En una ceremonia oficial celebrada en la mañana del 3 de junio de 2025 en el Salone dei Cinquecento del Palazzo Vecchio, se celebró una donación extraordinaria: la Biblioteca Serlupiana, con sus aproximadamente 14.000 volúmenes, pasa a formar parte del KHI. En presencia de la Alcaldesa de Florencia Sara Funaro, del Presidente de la Sociedad Max Planck Patrick Cramer, de los donantes Marchesi Don Raffaele y Doña Laetitia Carrega Bertolini, y de estudiosos y personalidades del mundo de la cultura, se selló un paso importante para la vida del instituto y para la investigación humanística.
Con la Biblioteca Serlupiana, el Kunsthistorisches Institut de Florenz - Max-Planck-Institut (KHI) recibe la mayor y más importante donación de su historia. Aunque el crecimiento de la biblioteca del instituto, desde su fundación en 1897 hasta la actualidad, se ha caracterizado por numerosas donaciones -incluidos fondos procedentes de bibliotecas privadas-, la Biblioteca Serlupiana supera con creces todas las anteriores. Incluye hasta 250 incunables, así como manuscritos, autógrafos y libros ilustrados de primera edición que datan aproximadamente de 1470 a 1940, abarcando disciplinas y literaturas. Gracias a su amplio horizonte cronológico y temático, la Serlupiana delinea un segmento esencial de la historia cultural y del conocimiento europeos, en su variedad mediática, histórica e intelectual, ofreciendo un inmenso potencial para la investigación internacional.
La colección fue iniciada en la década de 1920 por el conde Filippo Serlupi Crescenzi y su esposa Gilberta von Ritter de Zahony. Su conservación y ampliación fueron obra de Raffaele Carrega Bertolini y Laetitia Lefèvre d’Ormesson, a quienes se debe la donación al KHI, que incluye valiosa documentación que permite trazar la historia de la colección, ofreciendo interesantes perspectivas sobre el mercado anticuario de la época y las destacadas personalidades -estudiosos y coleccionistas- que contribuyeron a su formación en la Florencia de los años treinta. Entre ellos destacan personalidades cercanas al KHI, lo que demuestra el vínculo existente entre el Instituto y la colección desde sus inicios.
La donación de la Biblioteca Serlupiana se celebró por invitación del Ayuntamiento de Florencia en el Salone dei Cinquecento del Palazzo Vecchio. Asistieron a la iniciativa la Alcaldesa de Florencia, Sara Funaro, el Presidente de la Sociedad Max Planck, Prof. Patrick Cramer, Maddalena Fossombroni (fundadora y directora de la empresa cultural Todo Modo y de la editorial Picopress), el prof. Stéphane Toussaint (Sorbonne Université Paris - Centre André-Chastel) y los donantes Marchesi Don Raffaele y Donna Leatitia Carrega Bertolini, VI Príncipes de Lucedio. La ceremonia fue moderada por el Director del KHI, Prof. Gerhard Wolf.
A los donantes de la Biblioteca Serlupiana, el alcalde Funaro les entregó un premio de la ciudad de Florencia por su acto de generosidad, el Marzocco, uno de los símbolos de la ciudad, y un pergamino; el Presidente Cramer, a su vez, entregó a los donantes un premio simbólico de la Sociedad Max Planck.
Una selección de volúmenes de la Biblioteca Serlupiana se expondrá al público los días 10 y 17 de junio (de 14.00 a 18.00 horas) y el 13 de junio (de 10.00 a 13.00 horas) en el Kunsthistorisches Institut de Florencia (Via Giuseppe Giusti 44, 50121 Florencia). En esta ocasión se expondrán escritos de Marsilio Ficino, Dante Alighieri (con el comentario de Cristoforo Landino de 1481), el Liber chronicarum (1493) de Hartmann Schedel , dos obras de Girolamo Savonarola, las Opere varie (1750) de Giovanni Battista Piranesi , así como como, por ejemplo, Le Livre Blanc de Jean Cocteau, À l’ombre des jeunes filles en fleurs de Marcel Proust o Eaux-fortes originales pour des textes de Buffon (Histoire naturelle) de Pablo Picasso .
La integración de la Biblioteca Serlupiana en la infraestructura de investigación del KHI tiene dos consecuencias fundamentales. Por un lado, hace que la colección, hasta ahora desconocida, se abra y sea accesible a la ciudad y al mundo de la investigación, tal y como deseaban los donantes. Por otro, enriquece notablemente la labor del Instituto y aumenta su atractivo para la investigación internacional. El libro es a la vez instrumento y objeto de investigación humanística, en su doble función de medio de aprendizaje y vehículo de transmisión cultural. La historia de la edición, de la recepción y transferencia de conocimientos y sus condiciones relacionadas con la forma y materialidad del libro, pero también el proceso de producción y distribución, el comercio del libro y la cambiante cultura de la lectura y la escritura, sólo pueden investigarse eficazmente a partir de una base material lo más amplia posible.
Son precisamente estos aspectos los que hacen única a la Biblioteca Serlupiana: al evidente valor de su contenido se suma el carácter sistemático de la actividad de los coleccionistas, que permite rastrear la historia editorial y material de cada libro. El fuerte vínculo con la historia y la cultura intelectual de Florencia vincula a la Serlupiana con la ciudad en un doble hilo: Florencia, con su patrimonio artístico y sus tradiciones de investigación, se refleja en cada rincón de la biblioteca, contribuyendo a crear un instrumento de estudio y descubrimiento rico y sin precedentes. Este vínculo se refleja también en los numerosos proyectos de investigación histórico-artística e histórico-cultural del KHI, caracterizados por enfoques metodológicos diversificados y colaboraciones internacionales. La presencia de Florencia como telón de fondo amplifica aún más el valor de la Serlupiana, convirtiéndola no sólo en una colección de libros, sino en un auténtico laboratorio de la riqueza cultural y la tradición intelectual de la ciudad, un puente entre el pasado y el futuro.
Desde hace años, el KHI se dedica al estudio de los libros antiguos en su materialidad y fisicidad. La metodología de trabajo establecida en este campo -autopsia, documentación, posibles medidas de conservación, publicación de los resultados y digitalización- se aplicará en el futuro también a volúmenes seleccionados de la Biblioteca Serlupiana. Este proceso de análisis del libro constituye la base necesaria para su descripción multinivel y su posterior aplicación en contextos de investigación interdisciplinar. El uso de las nuevas tecnologías, incluida la inteligencia artificial, también permitirá generar y compartir otras perspectivas del conocimiento. Sin embargo, la investigación directa de los objetos y su contextualización dentro de una biblioteca de investigación humanística de orientación histórica, aunque moderna, seguirá siendo la base indispensable para una exploración exhaustiva de la historia del libro y del conocimiento.
Para el KHI, la donación de la Biblioteca Serlupiana representa una oportunidad fundamental para ampliar y consolidar las actividades de investigación, por ejemplo en historia del libro, e integrarlas en un discurso interdisciplinar con la historia del arte y las disciplinas vecinas. La donación fue recibida con entusiasmo por los estudiosos del instituto, por diversos que fueran sus intereses, proyectos y enfoques metodológicos, y abrirá nuevas y fascinantes perspectivas de investigación y transmisión de conocimientos a un público interesado. Para 2026/27 está prevista una gran exposición dedicada a la Biblioteca Serlupiana.
“Estamos orgullosos y agradecidos de poder acoger esta donación tan especial en nuestro Instituto de Florencia”, ha declarado el Presidente de la Sociedad Max Planck, el Profesor Patrick Cramer. “Durante años, el Kunsthistorisches Institut de Florencia ha realizado una labor fundamental para que los fondos de su biblioteca sean accesibles a nuevos enfoques de investigación, también en el contexto de las Humanidades Digitales. La Biblioteca Serlupiana ofrecerá nuevos impulsos tanto en términos de contenido como de metodología, y el entusiasmo que ha generado puede sentirse en todo el Instituto. Estoy convencido de que también resonará en la comunidad científica internacional”.
“Hoy celebramos un gesto clarividente y visionario y un acto de generosidad que expresa una idea elevada y compartida de comunidad”, afirma la alcaldesa Sara Funaro. “El Kunsthistorisches Institut de Florenz - Max-Planck-Institut, es una prestigiosa organización, apreciada por su perspectiva transcultural y su mirada sobre Italia, Europa y el Mediterráneo. Nuestro más sincero agradecimiento a Raffaele Carrega Bertolini y a su esposa Laetitia Lefèvre d’Ormesson: con esta donación han unido su nombre a nuestra ciudad para siempre. Nuestro especial agradecimiento también al director del Kunsthistorisches Institut de Florencia - Max-Planck-Institut, Gerhard Wolf, que ha aceptado con entusiasmo esta preciosa colección de libros, comprometiéndose a su conservación y mejora. Esta donación es una declaración de amor a Florencia. Estamos y estaremos al lado del Kunsthistorisches Institut, también para hacer accesibles las maravillas de la Serlupiana a estudiosos, investigadores, estudiantes y aficionados”.
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| Florencia, donación extraordinaria al Kunsthistorisches Institut: llega la Biblioteca Serlupiana |
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