Con su encendido oficial, quedó inaugurada la gran instalación luminosa Non basta il canto delle sirene (No es el canto de las sirenas), de Valerio Berruti, destinada a permanecer de forma permanente en el muelle norte del puerto canal de Cervia, lado Milano Marittima. Fue el propio artista quien la encendió por primera vez. La instalación es el último capítulo del Festival Mare d’Arte 2025, concebido por Gianluca Orazi y realizado en colaboración con Sky Arte, el Ayuntamiento de Cervia, la Región de Emilia-Romaña y APT Servizi Emilia Romagna.
La escultura representa una sirena-niña de seis metros de altura, completamente rodeada de agua. De día, el perfil de bronce patinado brilla, silueteado contra el mar en su encuentro con el puerto; de noche, la iluminación la hace emerger del agua como una criatura viva.
La obra encierra los valores que inspiran el Festival Mare d’Arte: la sirena como emblema del mar y la niña como símbolo de esperanza y futuro, con la intención de transmitir una idea de hospitalidad capaz no sólo de acoger, sino también de transformar.
La iluminación es el resultado de un proyecto especial concebido por Hera Luce, que junto con el Grupo Hera apoya la iniciativa. Se trata de un sistema de iluminación dinámico, capaz de modular el color y la intensidad para recrear, mediante un juego de luces, el movimiento y los colores de las olas, relatando así el cambio constante del paisaje marino. El concepto, desarrollado conjuntamente por Hera Luce y el escultor, pretende prolongar la vida de la obra incluso de noche.
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| La sirena-niño de Valerio Berruti se inaugura en Cervia |
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