Exposición individual de Mario Ceroli en Milán, con esculturas y obras murales en madera

Del 20 de febrero al 6 de abril de 2024, la Cardi Gallery de Milán acoge una exposición individual de Mario Ceroli (Castel Frentano, Chieti, 1938) titulada La meraviglia. Para la ocasión se expondrá una selección de dieciséis obras, muchas de las cuales rara vez se han presentado al público, que recorren su práctica artística, centrándose en particular en la producción de los años setenta y ochenta. Se exponen ocho esculturas monumentales de la serie Discorsi platonici sulla geometria (Discursos platónicos sobre la geomet ría) y ocho pinturas matéricas, que pretenden trazar una síntesis de la producción del artista, fuertemente caracterizada por el trabajo de la madera y una fuerte tensión hacia la reinterpretación de la iconografía clásica desde una perspectiva contemporánea. El objetivo del recorrido expositivo es, de hecho, ofrecer al público una visión de la rica actividad artística de Mario Ceroli, que va desde la investigación escultórica hasta las obras murales.

La planta baja estará reservada a las ocho imponentes obras de la serie Discorsi platonici sulla geometria (Discursos platónicos sobre la geometría), realizadas por el artista entre 1985 y 1990 en madera de pino ruso y de hasta 3 metros de altura.

El protagonista de la serie es la figura del gigante, representado en el acto de llevar la carga de una selección de imponentes figuras geométricas en las que el artista traza una referencia directa al plano platónico de ideas mencionado en el título. El modelo de referencia clásico del ciclo es el mito de Atlas, el titán castigado por los dioses y obligado a llevar el peso del mundo sobre sus hombros. Inspirándose en la iconografía tradicional, Mario Ceroli representa a sus gigantes en poses que transmiten una sensación de sufrimiento y fatiga, al tiempo que traduce sus músculos y cuerpos en formas modulares que recuerdan los cubos, conos, prismas y pirámides que están condenados a cargar.

En la planta superior estarán las pinturas matéricas, a las que el artista se dedica desde finales de los años setenta. Las formas y los colores de la madera, a menudo sin trabajar, son los protagonistas de obras como La Foresta Analoga, Pier Delle Vigne, Prova d’Orchestra e Inferno, que combinan arbustos, troncos y ramitas en la construcción de formas geométricas que eluden la bidimensionalidad del cuadro.

Mario Ceroli hace suya la lección de artistas como Giulio Paolini, Jannis Kounellis o Claudio Parmiggiani, al tiempo que mantiene su propia autonomía estilística, amplificada en términos de fuerza dramática y monumental.

Exposición individual de Mario Ceroli en Milán, con esculturas y obras murales en madera

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