La National Gallery de Londres ha anunciado la lista de estudios de arquitectura que competirán por el diseño de la nueva ala en el marco del Project Tomorrow, el programa de transformación de 750 millones de libras (unos 858,8 millones de euros) que pretende redefinir el papel de la institución en el panorama cultural internacional. El proyecto, una vez finalizado, permitirá al museo presentarse como un lugar donde el público podrá recorrer toda la historia de la pintura occidental dentro de un único complejo.
Se recibieron sesenta y cinco candidaturas en el procedimiento competitivo abierto a escala mundial. El 3 de diciembre de 2025, la National Gallery anunció las seis empresas preseleccionadas, enumeradas por orden alfabético: Farshid Moussavi Architecture con Piercy & Company, Foster + Partners, Kengo Kuma and Associates con BDP y MICA, Renzo Piano Building Workshop con William Matthews Associates y Adamson Associates, Selldorf Architects con Purcell, Studio Seilern Architects con Donald Insall Associates, Vista Building Safety Ltd y Ralph Appelbaum Associates. La siguiente fase del concurso conducirá a la designación del ganador y del equipo técnico de diseño antes de abril de 2026.
La evaluación de los proyectos se confía a un jurado compuesto por el Presidente del Patronato de la National Gallery, John Booth, que también preside el comité, la artista Céline Condorelli, el Director de la National Gallery, Gabriele Finaldi, la arquitecta Patty Hopkins, antigua ganadora de la Medalla de Oro del RIBA y miembro del patronato de la institución de 1998 a 2006, John Kingman, vicepresidente del Patronato, Dame Diana Lees, ex directora del Museo Imperial de la Guerra, y David Marks, presidente del Comité del Plan Maestro de la National Gallery. Las obras representan la tercera fase del plan director puesto en marcha en 2018. La nueva ala se levantará en el emplazamiento de St Vincent House, en el número 30 de Orange Street, el último segmento no rediseñado del actual campus de la National Gallery. El edificio, adquirido hace casi treinta años con el objetivo de ampliar el espacio expositivo, alberga ahora un hotel y un complejo de oficinas. Su demolición allanará el camino a una moderna ampliación que deberá integrarse con las preexistencias históricas del museo.
“Project Tomorrow es una campaña de 750 millones de libras que redefinirá la National Gallery para el próximo siglo”, afirma Gabriele Finaldi, Director de la National Gallery. “Gracias al importante apoyo que ya hemos recibido, estamos cobrando impulso hacia nuestra visión de crear nuevos espacios para albergar una colección ampliada, crear un fondo de adquisición de pintura moderna y, al mismo tiempo, garantizar la sostenibilidad financiera a largo plazo de la Galería a través de una sólida dotación. La National Gallery se creó para poner el gran arte al alcance de todos. Con esta nueva expansión física y artística, y con la inestimable ayuda de nuestros donantes, reafirmamos nuestro compromiso con el público. Queremos ampliar nuestro compromiso con los visitantes locales, nacionales e internacionales a través de exposiciones avanzadas, muestras, investigación, programas públicos e iniciativas educativas. Ahora esperamos dar la bienvenida a nuevos donantes y socios que nos ayuden a hacer realidad esta ambición compartida.”
“La renombrada colección de grandes pinturas de la National Gallery”, argumenta John Booth, “y nuestra ambición de desarrollarla aún más en beneficio de un público más amplio y diverso requieren un espacio que no sólo preserve y exhiba la colección, sino que también eleve la experiencia del visitante, mejorando la reputación de la Galería como uno de los museos más visitados e inspiradores del mundo. Esperamos encontrar el socio arquitectónico adecuado que se una a nosotros en este viaje único para crear un hito de importancia local e internacional: creativamente ambicioso, tecnológicamente innovador y respetuoso con el medio ambiente”.
El Proyecto Mañana también pretende renovar el tejido urbano entre Leicester Square y Trafalgar Square, con la intención de dotar a esta céntrica zona de una configuración más coherente y accesible. El nuevo edificio aprovechará los avances técnicos y constructivos de las últimas décadas, con especial atención a las cuestiones de sostenibilidad y eficiencia energética. La National Gallery define el proyecto como un futuro hito local e internacional, que reforzará la posición del museo en el contexto cultural mundial y apoyará la competitividad museística del Reino Unido.
El proyecto se beneficia de un apoyo financiero sin precedentes para la institución. Dos donaciones de 150 millones de libras cada una constituyen la base económica de la operación. La primera procede de Crankstart, una fundación filantrópica creada por Sir Michael Moritz KBE y Harriet Heyman; la segunda, del Julia Rausing Trust. Se trata de las dos mayores donaciones en metálico jamás hechas públicas a un museo o galería de arte en todo el mundo. A ellas se suman los 75 millones de libras donados por el National Gallery Trust, el propio presidente del consejo de la National Gallery John Booth y otros benefactores que prefieren permanecer en el anonimato. Según la institución, estas aportaciones permiten que el proyecto entre en fase operativa y garantizan el apoyo necesario para seguir adelante con el programa de ampliación.
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| Seis estudios optan a la nueva ala de 750 millones de la National Gallery |
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