Lorenzo Guzzini (Recanati, 1983) es el ganador de la 11ª edición del Premio Cramum de Arte Contemporáneo. Arquitecto y artista, obtuvo el galardón con su obra Tiempo lineal y tiempo cíclico, un campanario contemporáneo de cinco metros de altura diseñado como escultura site-specific y destinado a ser instalado de forma permanente en el parque de la bodega Cantina Terre Margaritelli, en Umbría.
La ceremonia de entrega tuvo lugar el 26 de junio en el Listone Giordano Arena de Milán, un espacio que se está convirtiendo cada vez más en punto de encuentro del arte, la arquitectura y la cultura en la capital económica de Italia. El Premio, comisariado y dirigido por Sabino Maria Frassà, se realizó en colaboración con Listone Giordano y Terre Margaritelli. El tema de la edición de 2025, El tiempo de la Tierra, fue abordado por diez finalistas de diferentes campos creativos: arquitectura, arte, diseño y escenografía. La obra ganadora de Guzzini fue seleccionada por el jurado presidido por Andrea Margaritelli, que también concedió dos menciones especiales a los artistas Livia Paola Di Chiara y Marco Paghera. La decisión se tomó teniendo en cuenta el alto nivel de las obras finalistas y el gran número de candidaturas recibidas.
"La obra Tiempo lineal y tiempo cíclico de Lorenzo Guzzini interpreta el tema de la edición con sensibilidad y fuerza visual“, explicó el jurado, ”abordando el tiempo como una doble dimensión: lineal para el ser humano, cíclica para la naturaleza. El campanario se integra en el paisaje con sobria autoridad, convirtiéndose en una referencia visual y sonora. El tañido diario a mediodía evoca una geografía de la existencia, recordando el equilibrio entre trabajo y contemplación, entre materia y espíritu. Concebida para madurar con el lugar, la obra representa plenamente la madurez artística: una síntesis de experiencia, conciencia y capacidad generativa. Un arte resistente a lo efímero, enraizado en el tiempo, en la tierra y en la comunidad".
Además del reconocimiento simbólico, Guzzini recibió el icónico cubo de cramum, diseñado en 2012 por Antonio Frassàyrealizado para esta edición en madera de cerezo europeo por el artesano Mario Rossi.
“Con Tiempo lineal y Tiempo cíclico”, afirma Sabino Maria Frassà, director del Premio, “Lorenzo Guzzini continúa su investigación sobre la relación entre forma esencial, materia y percepción, donde arquitectura y arte se funden en un único lenguaje. En esta obra, el tiempo no se representa de forma abstracta, sino como una experiencia concreta y cotidiana. Si para el ser humano el tiempo se percibe como lineal, la tierra, como muestra Guzzini, lo vive según un ritmo cíclico, marcado por el retorno de las estaciones y los gestos que nutren y regeneran. El campanario contemporáneo que imaginó destaca en el paisaje umbro como una presencia silenciosa pero constante: vertical, esencial, a la escucha. Su tañido diario a mediodía se convierte en ritual, orientación, memoria compartida. Como escribió John Donne: ”Nunca preguntes por quién doblan las campanas: doblan por ti“ No es un sonido nostálgico, sino una invitación a detenerse, a reflexionar, a recordar quiénes somos. Evoca el ritmo del ora et labora, y nos reconecta con un tiempo más humano y natural. El eco de Giacomo Leopardi también resuena en ese repique: ”Sonó la campana. La materia misma de la obra, viva y marcada por el tiempo, se enfrenta a su forma pura, en tensión entre fatiga y espiritualidad. Porque, como recordaba Ernest Hemingway citando a Donne: “¿Por quién doblan las campanas? Tañe por ti’”.
“Estamos orgullosos de la amplia participación y de la selección de diez finalistas, diferentes en edad pero unidos por una visión profunda y poco convencional del mundo”, afirma el Presidente del Jurado, Andrea Margatelli. “Al igual que la tierra que nos inspira, el arte, como la arquitectura y el diseño, debe ser capaz de acoger el cambio, no de temerlo. La obra de Lorenzo Guzzini encarna este principio con fuerza y medida. Sólo lo que crece lentamente, asentando su sentido y su identidad, puede revelar su autenticidad y su valor duradero a lo largo del tiempo”.
Los diez finalistas seleccionados para la 11ª edición fueron: Luca Antonio Bonifacio, BohoB (colectivo compuesto por Marialaura Calogero, Matteo Pennisi y Graziano Testa), Margherita Burcini, Livia Paola Di Chiara, Lorenzo Guzzini, Marco Nones, Marco Paghera, Andrea Papi, Giulio Rosi y Alfredo Vanotti, este último en colaboración con Fabio Sciuchetti. Además de Frassà y Margaritelli, el jurado del 11º Premio estaba compuesto por Tiziana D’Acchille, Franco Mazzucchelli, Fulvio Morella, Marco Tortoioli Ricci, Carla Tolomeo y Luca Zevi.
Lorenzo Guzzini es arquitecto y artista. Su investigación entrelaza arte y arquitectura, centrándose en la materia y las geometrías esenciales, interpretadas a través de los elementos y las ideas que las originan. Cada esfera dialoga con la otra: su obra se basa en una reflexión constante sobre la percepción humana del espacio y el tiempo. Tras licenciarse en Arquitectura por la AAM de Suiza, adquirió experiencia profesional en Inglaterra, Irlanda y Portugal. Desde 2010 dirige un estudio-atelier entre Milán y Como, activo en concursos residenciales, artísticos e internacionales. En 2025 fue nombrado profesor de Arquitectura de Interiores en la Scuola Politecnica di Design de Milán, donde imparte el curso Percibir el espacio.
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| El Campanario de Lorenzo Guzzini gana el XI Premio Cramum de Arte Contemporáneo |
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