Hauser & Wirth, una de las galerías de arte más influyentes del panorama internacional, ha adquirido el Palazzo De Seta, un edificio histórico situado en el centro del barrio palermitano de Kalsa. El acuerdo, según informa Repubblica Palermo, se formalizó a mediados de noviembre con la firma ante notario y supondría el primer asentamiento en Italia del gigante suizo, que cuenta con sucursales en Europa, Estados Unidos y Asia. Por el momento, sin embargo, la propiedad está sujeta a restricciones histórico-monumentales y la Región de Sicilia, junto con el Ministerio de Cultura, dispone de sesenta días para ejercer su derecho de tanteo. De hecho, el interés de la galería por Palermo no es nuevo. Ya en 2018, como escribe Artslife durante Manifesta, una exposición bienal itinerante de arte contemporáneo, habían circulado rumores sobre una posible negociación por el Palazzo Costantino, en los Quattro Canti. Ese diálogo no tuvo continuidad, pero no impidió a la galería seguir evaluando la posibilidad de establecer una sede en la capital siciliana. La adquisición del Palazzo De Seta marcaría, pues, la concreción de esa perspectiva, a pocos pasos del Palazzo Butera, la gran operación cultural llevada a cabo por el coleccionista Massimo Valsecchi.
El Palazzo De Seta había sido una de las sedes expositivas de Manifesta, entre las más visitadas de la bienal, y su fascinante estado de deterioro había llamado la atención por su capacidad para albergar intervenciones contemporáneas sin perder su carácter original. La estructura ocupa unos dos mil metros cuadrados, incluyendo la planta principal, el ala que da al actual Hotel NH, la zona conectada con la Porta dei Greci y un edificio que se destinará a funciones administrativas. A pesar de la venta, ANCE, la Asociación de Constructores de Palermo, propietaria del edificio desde 2003, conservará parte del espacio. La asociación ha gestionado las obras de consolidación, renovación y mantenimiento del complejo durante los últimos 20 años.
El Palazzo Forcella De Seta está considerado uno de los ejemplos más destacados deleclecticismo del siglo XIX en Palermo. Originalmente fue la casa costera de los Bonanno, príncipes de la Cattolica, encargados de vigilar el bastión de Vega de las murallas de la ciudad. Los daños sufridos durante los levantamientos revolucionarios de 1820 hicieron necesaria una remodelación general. En 1833, la propiedad pasó a Enrico Forcella, marqués de Villalonga, que contó con la participación de arquitectos de primera fila como Nicolò Puglia y Emmanuele Palazzotto. La parte central y la fachada que da al mar se rediseñaron según los cánones del neoclasicismo, con un doble orden de semicolumnas y pilastras jónicas. El interior presentaba tres salas distintivas: la llamada Sala de la Alhambra, la Sala Octogonal y la Sala delos Mosaicos. Los dos primeros espacios recordaban el estilo morisco, con decoraciones arabescas en estuco policromado, suelos de incrustaciones de mármol y una fuente inspirada en los jardines de la Alhambra. La Sala de los Mosaicos, por su parte, se hacía eco de la tradición decorativa de los palacios reales árabo-normandos, en particular la Sala del Rey Roger en el Palacio Real. Estas intervenciones se completaron con la contribución del arquitecto Giuseppe Patricolo, que rediseñó el alzado de la plaza Kalsa según un lenguaje neogótico, introduciendo aberturas archiacatadas. A principios del siglo XX, el palacio pasó a manos del marqués Francesco De Seta, prefecto de Palermo, quien encargó al pintor Onofrio Tomaselli el fresco del Triunfo de la Primavera en el salón neoclásico. El edificio se convirtió en uno de los lugares sociales más frecuentados de la Belle Époque palermitana. Entre 1937 y 1940, albergó la galería Mediterranea, dirigida por la pintora Lia Pasqualino Noto, y posteriormente se utilizó como salón de juego y, más tarde, como sede del Consejo de Justicia Administrativa.
La llegada de Hauser & Wirth, si se confirma tras la expiración del derecho de tanteo, insertaría al Palazzo De Seta en una red mundial que incluye Nueva York, Los Ángeles, Londres, Somerset, Zúrich, St. Moritz, Gstaad, Basilea, Menorca, Chillida Leku, Múnich, París y Hong Kong. Para Palermo, por tanto, representaría un nuevo capítulo en la transformación del barrio de Kalsa.
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| Hauser & Wirth adquiere el Palazzo De Seta en Palermo: hacia una nueva sucursal italiana |
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